Mirando a las estrellas

Muchas noches no puedo dormir bien, subo a la azotea, al frescor de la veraniega noche y miro al cielo.
Busco con cuidado, pues hay una estrella que he de encontrar, no es una fija, ni sé su nombre. Simplemente busco hasta que doy con una a la que poder confesar todo lo que siento, y prometerme que nada que nos separará.

Cuando sientas que estoy lejos, mira una estrella. Seguro que en ella he depositado todos mis deseos y mis sentimientos por ti.