Esta será una guerra como las de antaño, de las que cuentan las novelas.
Hombres que blanden sus espadas por sus convicciones, por sus creencias.
Los juglares cantarán las luchas eternas, pues es el amor el que está en pie de guerra.
No habrá tregua, no habrá descanso, toca luchar con el corazón en la mano.
Quizás caeré, y alguna vez no volveré a levantarme, pero no será en vano.
¡Prefiero morir en las puertas del Valhalla a vivir como un gusano!
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